Sobre mí

La vida, a veces obliga a uno a crearse sus propios mundos, porque ahí, se es verdaderamente libre. La pintura, siempre fue para mi, uno de esos pequeños mundos. Un refugio o nido de cobijos. Con el paso de los años, he experimentado con otras formas de expresión artística como la fotografía o el tatuaje. Ahora, tocaba la escritura. Además, desde hace casi una década, mi vida siempre ha estado marcada por las artes marciales, que más allá de las propias técnicas budokas, me ha servido como lanzadera hacia la mejora personal. Hacia el autoconocimiento y el crecimiento interno. Filosofías y conceptos orientales que siempre he tratado de extrapolar a mi vida para intentar vivirla como se merece, o como se merece la de todos nosotros, es decir, plenamente.